Los originarios visten distintas capas de colores. Las encomendadas a confeccionarlas son: la madre —para los hijos solteros— y, primordialmente, las recién casadas, que tienen esa labor desde el primer día de convivencia, bajo pena de no ser consideradas “buenas mujeres” en el ayllu. Ellas deben renovar la indumentaria de sus esposos cuando los ponchos estén viejos.
Los tonos preferidos son:
• El rosado es empleado para las festividades de Carnaval, cuando la pareja visita a sus padrinos de casamiento para hacerles cargar pan e invitarles a comer cordero, ch’alla (bendecir) de agradecimiento para demostrarles que están “viviendo bien”.
• El anaranjado es para actos internos en el ayllu.
• El verde es anuncio de la época de siembra.
• El noval (color tierra) es utilizado para el tiempo seco que llega después de la cosecha de papa o chuño.
• El huayruro (rojo y negro) es usado para actos conmemorativos y religiosos, como los solsticios.El poncho rojo
El poncho rojo es sacro por excelencia. Por ello, este tipo de vestido no puede ser hallado fácilmente para comprarlo. Es que la mujer debe tejerlo con amplia concentración e incluso ayunar para ello. “Generalmente lo hilan entre dos esposas —comenta Lino—. Ellas practican el ayni (Sistema de trabajo colla que consiste en la ayuda mutua entre familias), porque esta a necesita dos telares, o sea, tiene dos partes que al final se cosen. Debe pedirse a la Pachamama ('madre tierra' en idioma aymará) para que salga bien, porque, si no, eso puede vaticinar que el hombre no va a vivir mucho tiempo”.
Para este trabajo, la lana de oveja es teñida de rojo con colorantes especiales (tipo ocre) que son bendecidos y entregados por el kallawaya (médico naturista). “Se forma —relata Poncio— una especie de harina mezclada con agua hervida donde se pone la lana para luego secarla y formar pelotitas. En total, la confección de un poncho puede durar todo un año, tomando en cuenta que las esposas no hilan las 24 horas, sino que también siembran y realizan otras labores en la casa”.
Posteriormente, la túnica roja puede recibir otros “adornos”, como alguna tira azul en los bordes, en alusión a los laramas, que eran los científicos collas precolombinos que, con su bayeta azul, tenían el poder de hablar con la Pacha y de pronosticar cómo iba a ser la siembra durante décadas; o también puede colocarse una franja verde en el costado de la prenda, símbolo de la paz durante la siembra.
El poncho rojo puede ser usado por los jóvenes desde los 15 años, solamente en época de guerra. “Por eso —refiere Lino—, esta indumentaria es temida y las familias prefieren no tenerla. Y si un hermano viera a alguien con esta capa, se puede asustar y preguntarle qué problemas hay. Esta ropa es sagrada, para utilizarla se debe pedir permiso al jilakata, el capitán de todo lo que pasa en el ayllu y el que da la orden para usarla”.
El poncho color huayruru (rojo y negro)No se debe confundir un poncho color rojo con uno de color huayruru. El rojo se utiliza solamente cuando hay guerra. El huayruru se la utiliza como se dijo en actos conmemorativos , desfiles, actos oficlaes, votaciones, elecciones, etc
Los tonos preferidos son:
• El rosado es empleado para las festividades de Carnaval, cuando la pareja visita a sus padrinos de casamiento para hacerles cargar pan e invitarles a comer cordero, ch’alla (bendecir) de agradecimiento para demostrarles que están “viviendo bien”.
• El anaranjado es para actos internos en el ayllu.
• El verde es anuncio de la época de siembra.
• El noval (color tierra) es utilizado para el tiempo seco que llega después de la cosecha de papa o chuño.
• El huayruro (rojo y negro) es usado para actos conmemorativos y religiosos, como los solsticios.El poncho rojo
El poncho rojo es sacro por excelencia. Por ello, este tipo de vestido no puede ser hallado fácilmente para comprarlo. Es que la mujer debe tejerlo con amplia concentración e incluso ayunar para ello. “Generalmente lo hilan entre dos esposas —comenta Lino—. Ellas practican el ayni (Sistema de trabajo colla que consiste en la ayuda mutua entre familias), porque esta a necesita dos telares, o sea, tiene dos partes que al final se cosen. Debe pedirse a la Pachamama ('madre tierra' en idioma aymará) para que salga bien, porque, si no, eso puede vaticinar que el hombre no va a vivir mucho tiempo”.
Para este trabajo, la lana de oveja es teñida de rojo con colorantes especiales (tipo ocre) que son bendecidos y entregados por el kallawaya (médico naturista). “Se forma —relata Poncio— una especie de harina mezclada con agua hervida donde se pone la lana para luego secarla y formar pelotitas. En total, la confección de un poncho puede durar todo un año, tomando en cuenta que las esposas no hilan las 24 horas, sino que también siembran y realizan otras labores en la casa”.
Posteriormente, la túnica roja puede recibir otros “adornos”, como alguna tira azul en los bordes, en alusión a los laramas, que eran los científicos collas precolombinos que, con su bayeta azul, tenían el poder de hablar con la Pacha y de pronosticar cómo iba a ser la siembra durante décadas; o también puede colocarse una franja verde en el costado de la prenda, símbolo de la paz durante la siembra.
El poncho rojo puede ser usado por los jóvenes desde los 15 años, solamente en época de guerra. “Por eso —refiere Lino—, esta indumentaria es temida y las familias prefieren no tenerla. Y si un hermano viera a alguien con esta capa, se puede asustar y preguntarle qué problemas hay. Esta ropa es sagrada, para utilizarla se debe pedir permiso al jilakata, el capitán de todo lo que pasa en el ayllu y el que da la orden para usarla”.
El poncho color huayruru (rojo y negro)No se debe confundir un poncho color rojo con uno de color huayruru. El rojo se utiliza solamente cuando hay guerra. El huayruru se la utiliza como se dijo en actos conmemorativos , desfiles, actos oficlaes, votaciones, elecciones, etc
COMENTARIOS